Calvin & Hobbes, y la filosofía de la tira cómica.

¿ Qué ocurriría si alguien se encontrara con su clónico, pero sabiendo que este está formado únicamente por lo mejor del original?.

 

Uno de entre los grandes inventos de Calvin es el Ethicator. Este puede parecer no más que una caja de cartón boca abajo, pero en realidad dicha caja de cartón es una poderosa máquina, capaz de duplicar a una persona. Sin embargo, mediante la selección con la flecha instalada a tal efecto de la opción del Bien o del Mal, la copia se realiza utilizando únicamente lo que de bueno o de malo tenga esa persona. Calvin fue el inventor y primer usuario del Ethicator, haciendo una copia de si mismo según la versión del Bien. El resultado del proceso fue un Calvin perfectamente peinado ( Calvin se caracteriza por el pelo permanentemente rebelde ), que se levanta por las mañanas sin haber sido llamado, recoge los platos del desayuno, hace los deberes y contesta correctamente a las preguntas en clase. Asombrado por la eficacia de su invento en todo aquello que le aburre o le molesta, el Calvin real preguntará al Calvin bueno que satisfacción encuentra en comportarse de manera tan recta, a lo que este responderá, muy tieso y orgulloso, que la virtud es una recompensa en sí misma.

 

Las cosas se complican cuando el Calvin virtuoso topa con Suzie, la vecina. Empezará por ofrecerse a llevarle los libros al colegio ( para desconcierto y desconfianza de esta, habituada al Calvin real ), y como lo bueno lleva a lo bello, el Calvin virtuoso acabará recortando corazones para mandarle mensajes de amor. Cuando el Calvin real se entera de ello ( es, entre otras cosas, dictador de por vida del llamado algo así como Club Para Deshacerse de la Grimosas Niñas ), siente su reputación, su honor y sus principios mancillados por ese Calvin que no deja de ser él mismo.  

 

El aviso del comportamiento del Calvin virtuoso para con Suzie, viene de Hobbes. Para el resto de personajes de la serie, Hobbes es simplemente un tigre de peluche, que lleva Calvin siempre encima. Para Calvin, Hobbes es un tigre, un amigo y compañero. Lo es implícitamente, ya que en ningún momento se indica el porque de la doble naturaleza de Hobbes ( tigre y muñeco). Lo es, porque la práctica de las viñetas así lo ilustra. Calvin no es nada sin Hobbes, de la misma manera que Hobbes no es nada sin Calvin. El universo de Calvin es con Hobbes. Si alguien, en algún momento, siente la necesidad de saber si Hobbes es tigre, o es muñeco, lamentablemente, Calvin y Hobbes no es para él.

 

Y es que Calvin y Hobbes ofrece un juego. Y en ese sentido, Hobbes es una regla ( implícita ) esencial al juego. Una vez aceptada, se puede entrar a los mundos posibles de Calvin: Calvin convertido en dinosaurio sembrando el terror en la escuela, Calvin convertido en el heroico Spaceman Spiff escapando de aquellos momentos o lugares donde no queremos estar, el detective Tracer Bullet o su manera-dura-de-estar-en-el-mundo, las mil y una espantosas formas del almuerzo en la bolsa de picnic, los cambios en el universo o los problemas de gravedad invertida en el mismo momento de comenzar a hacer los deberes, o la impotencia ante la ropa del cajón, que salta sobre nosotros para dar esa combinación de colores no del todo tan afortunada.  

 

Calvin y Hobbes están siempre en continua actividad. Juegan, corren, construyen, destruyen, inventan. Y cuando no lo hacen, es porque algo se lo impide, de manera que estarán maquinando la manera de hacerlo. En este sentido, es una filosofía asociada al movimiento ( en particular, el juego ). Y como tal, es eminentemente práctica. En este sentido, la filosofía de Calvin y Hobbes podría considerarse una filosofía clásica, asociado al día a día, a la praxis. De resultas, los temas sobre lo que tratan son los relacionados con ese continuo movimiento: el conflicto con los otros ( los padres de Calvin, la babysitter, Suzie, el matón del colegio ), sobre todo aquello que Calvin piensa que llegará a ser, el amor, la sociedad. Hobbes permite a Calvin un elemento fundamental, y es la posibilidad del diálogo ( y que es, al mismo tiempo, imprescindible para la tira cómica ). Como ya he dicho, Calvin no es sin Hobbes, y viceversa, y esto surge de sus habituales conversaciones o peleas. Pura utilización de la ironía como desarrollo de pensamiento. En muchos casos, los puntos de vista de Calvin y Hobbes frecuentemente no coinciden, siendo Hobbes el que remarque o comente la inconsistencia del discurso y los actos de Calvin. En el retorno a la naturaleza que representan los paseos por el campo, Hobbes, que debe su nombre al filósofo, ofrece su punto de vista felino y su consuelo ante lo incomprensible del comportamiento humano.

 

Pero en Calvin y Hobbes, dentro del juego, hay también metafísica, que ocurre en las bajadas en carricoche o trineo, después de esquivar árboles, rocas y peligros varios, para acabar volando por los aires en la última viñeta ( rara vez los vemos estrellados, sino siempre a punto de estrellarse ). En esos momentos, son personajes de destino, ya que la bajada imparable les hace víctimas de las acontecimientos. Conscientes de ellos, utilizan esos que pueden ser sus últimos momentos, para intentar encontrar el sentido de la existencia. Son ejemplos claros y explícitos de como la metafísica es un resbalón con respecto a la vida cotidiana.

 

Calvín y Hobbes es también ética. Una ética práctica, juguetona, y que aparece periódicamente asociada a los regalos de Santa Claus. Llegadas las Navidades, Calvin se debate entre el deber de ser bueno, y su naturaleza expansiva, que le llevaría a pelearse e insultarse con Hobbes, o irresistibles ganas de pegarle un bolazo de nieve a su vecina Suzie.  

 

Y es que cuando el Calvin real se encuentra con el Calvin virtuoso, se echan en cara el uno al otro sus respectivas actitudes para con Suzie. La cosa se calienta tanto, que en determinado momento, el Calvin virtuoso se evaporiza, a raíz del conflicto entre su naturaleza estrictamente buena y sus deseos de lanzarse sobre el Calvin real. Hobbes, viendo lo ocurrido, pregunta a Calvin sobre que se siente al haber hecho desaparecer su parte virtuosa. Alivio, contesta él. La presencia física de su lado bueno, se estaba haciendo mucho más difícil de ignorar que su conciencia.